Han pasado unos meses desde que llego a nuestra vida, toda una sorpresa aunque a más de uno, les causo conflicto, pero al verla ufffff, imposible no enamorarse de ella, es tan pequeña, tan bonita y tan frágil, que dan ganas de apachurrarla.
Desde entonces han pasado muchas cosas, desde platicas preocupantes, hasta planes con la pequeña Brisa, pero de todo lo que sucede, me quedó con todo, pero sin duda me quedó con el amor incondicional de mi familia, pero de todo eso, con el amor de mis papás...
Les voy a explicar, todo esto es complicado porque nadie sabía, era como algo que sospechaban pero no algo que pudieran asegurar. Cuando sucedió el nacimiento, obviamente había sentimientos encontrados, enojo y felicidad por parte de ellos, me gustaría decirle que intervine y los hice caer en razón, pero mis papás son personas increíbles, toman decisiones con el corazón, nunca enojados, siempre conscientes de sus acciones, no les puedo describir la admiración que tuve cuando mi madre dijo:
"Es mi HIJA y no la voy a dejar sola"
O cuando me padre dijo:
"Nosotros siempre te vamos a apoyar en lo que necesites y NUNCA te vamos a dejar sola".
Si bien este años ha sido increíble, este momento se convirtió en mi momento favorito, mis papás son unos cursis de lo peor jajajaja, pero siempre he contado con ellos, ahora sé que lo estarán. A mi hermanita, vaya sorpresa que nos diste, cuanto amor derrochas por Brisa, la conclusión de hoy es que todos en esta familia somos unos cursis, menos YO.
Por cierto, aquí lo verdaderamente importante y lo mejor de esta pequeña BRISA es que... redoble por favor... Hermano saltado, HERMANO QUEDADO Y GRACIAS POR ESTA OPORTUNIDAD DIOS, NO LA DESAPROVECHAREEEEEE!!